good music

sábado, 18 de octubre de 2014

Fading away.

Mi intención no es inundar el teclado con lágrimas, pero en este momento necesito desahogarme.

Era una tarde descomunal. Un sábado más. Estaba todo tranquilo y organizado, todo estaba en orden. Hace unas horas mi rostro sostenía una sonrisa. Hace unas horas podría decir que me sentía bien...
Hasta que recibí esa llamada.
Traté de asimilar todo lo más rápido que pude y quise mantenerme de pie, pero la sensación de hundimiento se acrecentaba en mi de a poco y dificultaba mi respiración.
Fingí desinterés, que no me causaba nada, que no me dolía. Fingí.
No estaba lista.
Mi ciego optimismo me incitaba a pensar todo de una forma positiva, que no era lo que parecía, que todo tiene una explicación razonable. ¿La tiene?
O tal vez soy lo suficientemente pesimista para imaginar hechos que nunca sucedieron y las peores cosas. Cosas que me parten por la mitad.
Intenté tragarme el nudo en la garganta y no comenzar a llorar mientras decía "Bueno, mirá vos, está bien..."
Después de eso todo comenzó a salir mal y el día que tenía planeado se alejó fugazmente.


Y ellos me dicen que probablemente fue un mal entendido, que la situación no presenta algo para que me sienta amenazada.
 Pero después estoy yo y mi eterna lucha con mis pensamientos.

No estoy lista y creo que nunca lo voy a estar.
Sé que suena egoísta de mi parte, y sí, lo admito, pero no quiero verte con alguien más, no lo soportaría. También sé que la vida sigue y vos no vas a parar por mi, alguien a la que nunca vas a ver con los mismo ojos, tampoco debes hacerlo. Creo que me tendré que acostumbrar a vivir bajo las penumbras de mi angustia, de no tenerte a mi lado, de que no sepas lo que siento, de decepcionarte.

Estoy atrapada. Hay tantas cosas que me gustaría que sepas, tantos muros que me gustaría romper...
Te diría que te extraño pero no sé como. Y esa soy yo, todo el tiempo, tratando de reprimir mis sentimientos cada vez que te veo. Y ese sos vos, dándote cuenta de que no me sale.



Con circunstancias como estas te das cuenta quienes están a tu lado. Lamentablemente me hallé sola en las cuatro paredes de mi habitación llorando desenfrenadamente, esperando un mensaje, que alguien muestre algo de preocupación, estaba esperando un abrazo, pero nada de esas cosas obtuve. Mientras todos siguen ocupados con sus propias vidas, acá estoy yo, escribiendo, de nuevo en este espacio.
En lugar de personas brindándome afecto encontré compañía en la música, me hundí en ella y me dejé llevar hasta conciliar el sueño, por un rato.

Esto es todo lo que me sale ahora. Esto es todo lo que puedo decir.



Buenas noches.